Como es sabido en toda la comunidad deportiva, hoy (23 de junio) se celebra en todo el mundo el Día Olímpico. El Jefe de Prensa y Relaciones Institucionales del Comité Olímpico Argentino, Sr. Eduardo Moyano, difundió esta mañana temprano una carta firmada por Mario Moccia, Secretario General del C.O.A. y Gerardo Werthein, presidente de la entidad con motivo de salutación en este día y año tan especial, ya que en pocas semanas comenzarná a desarrollarse los Juegos Olímpicos de Londres 2012.

La carta dice así:

Queridos amigos del Movimiento Olímpico,

El Olimpismo Moderno fue concebido por Pierre de Coubertin, a cuya iniciativa se reunió en 1894 el Congreso Atlético Internacional de París, en la Universidad de la Sorbona , dando lugar a la creación del Comité Olímpico Internacional el día 23 de Junio, considerado actual y universalmente el Día Olímpico.

El Olimpismo es una de las fuerzas sociológicas más importantes de los Siglos XX y XXI, pues no hay dentro del marco de las relaciones humanas una actividad, sea cultural, científica, política, filosófica o artística, que congregue a tantos adeptos y tenga la fuerza penetrante y sutil de convocatoria para lograr en forma puntual y periódica, la reunión de un variado mosaico de razas, lenguas, religiones, sistemas políticos, culturales o económicos en una fiesta brillante, como son los Juegos Olímpicos.

Nuestro país fue fundador del Comité Olímpico Internacional (COI), con la presencia del abogado José Benjamín Zubiaur, quien integró el primer Consejo Ejecutivo siendo uno de los 13 Miembros iniciales.

El Olimpismo es una filosofía de vida, que exalta y combina en un conjunto armónico, las cualidades del cuerpo, la voluntad y el espíritu. Al asociar el deporte con la cultura y la formación, el Olimpismo se propone crear un estilo de vida basado en la alegría del esfuerzo, el valor educativo del buen ejemplo, la responsabilidad social y respeto por los principios éticos fundamentales universales.

Quienes restablecieron el Olimpismo, pretendieron poner el deporte al servicio del desarrollo armónico del hombre, con el fin de favorecer el establecimiento de una sociedad pacífica, comprometida con el mantenimiento de la dignidad humana.

De estas ideas y sentimientos surgió el Movimiento Olímpico. Por todo lo expresado, enviamos un cálido saludo a todos los integrantes de la familia olímpica, que nos acompañan a diario en la difusión de los principios y valores del olimpismo.