El automovilismo es un deporte que se rige por la velocidad, con el objetivo de retar y vencer al tiempo. Un segundo puede ser la vital diferencia entre la bandera a cuadros y un mal resultado. Es por esto, que la firma de relojes Graham acompaña en cada fecha a Fiat Abarth Competizione como sponsor oficial.

Bruno Marioni luciendo su Graham Silverstone Stowe Racing Blue.

Bruno Marioni luciendo su Graham Silverstone Stowe Racing Blue.

Fundada hace más de 300 años, la firma de relojería suiza se caracteriza por sus diseños atrevidos y de mecanismos resistentes. Más aún, se define como relojes que nos son para tímidos.

Justamente, si de valentía se trata, Bruno Marioni ha demostrado poseer la audacia suficiente que se requiere para destacarse en la grilla de la categoría monomarca más importante de la región. De hecho, Graham, a través de Joyería Chronos, le obsequió un Silverstone Stowe Racing Blue al alzarse como el campeón de Fiat Abarth Competizione en la última temporada.

Como su nombre lo indica, el modelo que utiliza el exfutbolista está inspirado en el mítico circuito del Reino Unido de Gran Bretaña. Con materiales propios del deporte motor, esta colección constituye un tributo a la edad dorada de las carreras automovilísticas. El Silverstone Stowe Racing Blue es un cronógrafo automático calibre G1742, con caja de acero, recubierto con PVD negro y una correa de caucho que emula a un neumático de carrera, lo que lo convierte en un reloj que refleja el fiel ADN de las carreras.

“Al igual que en Fiat Abarth Competizione, parte esencial de la filosofía de Graham es la atención a los detalles y la reinvención constante para ofrecer algo exclusivo a sus clientes. Participamos en eventos de prestigio y trayectoria en el automovilismo como el Tourist Trophy o la Porsche Cup en Suiza con un auto Graham, y creemos que esta categoría representa los niveles de exclusividad que nosotros queremos transmitir”, afirma Charles Marin, Area Sales Manager de la marca.

Queda aún mucho camino por recorrer dentro de esta asociación. Un nuevo reloj espera a su campeón.

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