Importantes iniciativas pastorales se ponen en marcha

PRETORIA, martes 4 de mayo de 2010 – A pocas semanas para el comienzo del Mundial de Fútbol 2010, la Iglesia católica en Sudáfrica ha comenzado ya una serie de actividades pastorales, que llevan preparándose desde hace más de un año, a través de la campaña «Church on the ball».

Las actividades pastorales van, desde una reflexión del deporte desde el punto de vista de la fe católica, a la pastoral juvenil, la pastoral familiar, la pastoral de acogida a los extranjeros que acudan al mundial, la oferta de servicios religiosos en varios idiomas, etc. Incluso se ha compuesto una oración especial.

El momento cumbre será la celebración de la apertura del Mundial. El domingo, 13 de junio, ha sido designado oficialmente por la Conferencia Episcopal de Sudáfrica como World Cup Sunday.

Según explica fray Francois Dufour SDB, del equipo organizador «Church on the Ball 2010», ese domingo, además de ser el comienzo de la semana inaugural, es también el día de conclusión del Año Sacerdotal convocado por el Papa.

El objetivo de esta celebración es «dar la bienvenida desde Sudáfrica al mundo», explica Dufour. «Esta bienvenida nos ayuda a darnos cuenta de que a pesar de nuestras nacionalidades y equipos, todos somos el único pueblo de Dios». Está previsto que el World Cup Sunday se celebre en la Misa con lecturas apropiadas, con ritos penitenciales, oraciones de los fieles especiales para la ocasión, etc.

Los obispos sugieren que las homilías se centren en la reconciliación, en línea con lo previsto por el Sínodo Especial para África de 2009, y con la carta pastoral de los obispos sudafricanos de 2008. Otra sugerencia es que se reafirme que, mientras que el Mundial promueve una gloria temporal, «los creyentes deben recordar que la vida es más que las recompensas terrenas».

Otro de los objetivos durante el Mundial 2010 es la pastoral de niños y jóvenes, con la asistencia de las organizaciones juveniles católicas, entre ellas Xaveri Movement, inspirada en san Francisco Javier, y que pretende ofrecer ambientes lúdicos «seguros», Holiday Clubs, para los niños en las parroquias, mientras dure la competición.

Agencia ZENIT.org